Fotos revista "Armas"
En 1916,pronto se cumplirá el siglo,Europa era una caos.La Gran Guerra como se le dio en llamar a pesar de que la Segunda,sería muchos más "grande",llevaba ya más de dos años,y millones de muertos por delante.El 1916 fue un año muy especial,lleno de grandes e importantes acontecimientos.Verdún,zona fortificada,al este de París,era objetivo prioritario para el Ejército Alemán.A las 16 horas y 45 minutos del día 22 de Febrero de este año da comienzo una de las más duras batallas que a la larga determinarían el resultado final de la contienda.
Pero,¿que tiene que ver ésto con la pistola Warwinck?,se preguntarán Vds..Muy sencillo,entre los fusiles Mauser y Lebel,entre los revólveres MAS, y las pistolas P08,entre el gas mostaza,el armamento ligero y pesado que de una u otra forma estuvo presente en la contienda y entre los miles de hombres que combaten en el lado francés hay un joven oficial,en cuya cintura,resguardada por su funda de gran solapa,porta una "Warwinck".Automatic Pistol 7,65 Warwinck,reza grabada sobre el cierre una leyenda en inglés.
Sin embargo se trata de un arma española,una pistola "eibarresa" fabricada en torno a la primera decada del Siglo XX y sobre la que se desconoce por que extraños caminos ha llegado a ser el arma reglamentaria de este joven oficial francés. Como ya se apuntó con anterioridad se trata de una "eibarresa" en calibre 7.65 mm,algo más apropiada,no demasiado,para defensa personal que como reglamentaria de un oficial de combate,fabricada al rededor de 1912 por la firma eibarresa "G.Arizaga",fabricante también de los modelos "Mondial" y "Pinkerton" en calibre 6,35.
A primera vista recuerda,en diseño,a la "Savage" americana y quizá más aun a la española Astra 300,aunque ésta última no saldría al mercado hasta 1923.En las imágenes de la izquierda tiene en primer lugar una Warwinck,seguida de una Astra 300 y una Savage donde se puede notar su parecido.
A primera vista recuerda,en diseño,a la "Savage" americana y quizá más aun a la española Astra 300,aunque ésta última no saldría al mercado hasta 1923.En las imágenes de la izquierda tiene en primer lugar una Warwinck,seguida de una Astra 300 y una Savage donde se puede notar su parecido.
La Warwinck tiene el martillo interior,aunque sería más correcto decir que carece de él y presenta unas acusadas hendiduras verticales en la parte posterior de la corredera con el objeto de facilitar el montado del arma.Por detrás de estas hendiduras existen dos grandes rebajes que le dan un aspecto muy característico.La ventana de expulsión de las vainas ,situada en el costado derecho de la corredera es amplia y está dotada de gran uña extractora que lanza las vainas a la derecha.
El
sistema de percusión,mediante aguja lanzada es de gran sencillez,consiste
en una aguja que se mueve por un canal que la lleva al final de su
recorrido hasta el fogón.La masa de la aguja,en cuyo interior hueco
penetra un muelle largo que se apoya por su otro extremo en un saliente
que presenta el armazón,tiene la suficiente masa y recorrido como para
iniciar el cartucho al golpear sobre el pistón.
Al
ir el cierre hacia atrás,arrastra a la aguja hasta dejarla enganchada
por su tetón en el retenedor.Queda así sujeta hasta que la acción del
dedo sobre la cola del disparador hace que la biela bascule el retenedor y un saliente
de éste,al hundirse,libera la aguja que se lanza,por acción del
muelle,hacia el cartucho,realizándose de este modo el disparo.De este
modo se sustituye el martillo por una aguja percutora en tensión
constante por su largo muelle interior.
El arma está dotada de dos seguros,uno de aleta situado en el costado izquierdo de la corredera.Este seguro con un giro de 90º entre las posiciones de fuego y la de seguro es muy cómodo de utilizar,cómodo son todos los de este tipo y por ello han sobrevivido al paso del tiempo.La aleta,al realizar el giro de 90º coloca una pieza anexa a su eje de giro que impide que al accionar el disparador se pueda producir la basculación del retenedor y en consecuencia la liberación de la aguja percutora.El otro es el segundo de cargador el cual se acciona en el último tramo de entrada de éste al hacer retroceder un tope que impide,cuando el
cargador no está introducido,que la biela realice su acción de bascular
el retenedor.Si el cargador no esta al menos casi introducido,la biela
resbala sobre el tope y en consecuencia no se puede producir el disparo.
El despiece elemental es muy sencillo y para ello es suficiente un destornillador para retirar las cachas. Rodeando la boca de fuego hay una pequeña pieza que gira manualmente en ambos sentidos y que libera el muelle recuperador,concéntrico al cañón.Esta pieza cilíndrica y corta tiene dos tetones que enganchan en un vaciado circular con dos hembras que presenta la parte más interior del cierre (haciendo de "abogado del diablo" se podría decir que este mismo sistema fue copiado por la firma Astra para el Modelo 400 y posteriores).Al sacar el muelle el cierre queda libre y llevándolo hacia atrás nos permite girar el cañón en sentido contrario a las agujas de reloj,liberándolo de su enganche,formado por tres tetones sobre la base del cañón,debajo y por fuera de la recámara y que encastra con cinco tetones de sentido contrario que se encuentran situados en la parte alta del armazón y cuyo conjunto forma el pestillo de acerrojamiento.
Si ahora llevamos la aleta de seguro,situada a la izquierda,a la posición de fuego,al avanzar la corredera ésta queda libre y podremos apreciar el sistema Browning del Modelo 1910,funcionamiento por retroceso de masas,aunque con algunas variaciones.
Diez meses después de iniciarse el ataque alemán,exactamente el 18 de Diciembre de 1916 terminaría la batalla de Verdún.El suelo dejará de temblar,sin embargo la zona quedará marcada por la
"viruela " de las bombas.
Monumentos conmemorativos y gigantescos cementerios recuerdan,al que por allí pase,la intensidad de la lucha que se vivió en aquel rincón de la frontera franco-alemana,pero todo ello,al igual que la pistola Warwinck que portaba aquel joven oficial,son cosas pasadas que entran de lleno en el campo de la historia.Una historia de guerras que,desgraciadamente,el ser humano se empeña en repetir.
Monumentos conmemorativos y gigantescos cementerios recuerdan,al que por allí pase,la intensidad de la lucha que se vivió en aquel rincón de la frontera franco-alemana,pero todo ello,al igual que la pistola Warwinck que portaba aquel joven oficial,son cosas pasadas que entran de lleno en el campo de la historia.Una historia de guerras que,desgraciadamente,el ser humano se empeña en repetir.