


La primera generación de la Colt Detective Special apareció en 1927. Desde su nacimiento, este revólver de doble acción gozó de gran popularidad entre la policía, lo que llevó a que se fabricaran más de un millón y medio de unidades. Sin embargo, esta arma dejó de producirse definitivamente en 1986, aunque todavía existen numerosos modelos en funcionamiento en el mercado armamentístico.
Aunque el modelo original empleaba un potente calibre .32, esta munición pronto dejó paso al célebre .38. A diferencia de los revólveres de Smith & Wesson, el cargador de tambor de la Detective Special gira siguiendo el sentido de las agujas del reloj.
Aunque el modelo original empleaba un potente calibre .32, esta munición pronto dejó paso al célebre .38. A diferencia de los revólveres de Smith & Wesson, el cargador de tambor de la Detective Special gira siguiendo el sentido de las agujas del reloj.