11 de agosto de 2012

Carabina Alfa-proj Hunter




Salvando las pequeñas diferencias existentes,y digo pequeñas por que una vez más los hechos  nos demuestran que con respecto a este tipo de armas  ya está todo inventado,se tiene  constancia que durante la segunda mitad del Siglo XIX,aunque no con el mismo exito que las pistolas y revólveres tipo Lefaucheux,esta combinación de revólver y carabina gozo de una gran popularidad ,especialmente en el tiro de precisión y en menor grado para la práctica de deporte de la caza.

 
Carabina-revólver tipo Lefaucheu del Siglo XIX

El arma que nos ocupa,la carabina Alfa-proj,fue fabricada por la compañía del mismo nombre,ubicada en la ciudad checa de Brno, una localidad mundialmente famosa por la fabricación de armas de todo tipo desde hace ya más de un siglo y situada en una región en la que la tradición armera de calidad se remonta a cientos de años.
Esta empresa, que hoy cuenta con casi centenar y medio de empleados, se fundó en 1993, dedicándose fundamentalmente a la elaboración de armas detonadoras y grilletes. Al cabo de no mucho tiempo su actividad creció incluyendo los revólveres de la denominada clase Holek (otro apellido importante en la armería checa), para disparar cartuchos de los calibres .22 LR y .38 Spl, y poco después sería la gama Alfa Steel la que se dedicaría a este mismo tipo de armas en calibre .357 Magnum. Pero todavía su actividad se demostraría más variada al incluir desde 2002 en su catálogo las pistolas semiautomáticas en las series Combat y Defender, con modelos en 9 mm Parabellum y .45 ACP. Finalmente, un año después se ofrecerían modelos neumáticos y de Co2 para tiro deportivo,sin olvidar los revólveres para los cartuchos 6 mm ME-Flobert y 4 mm Randz.
Vamos a centrarnos en esta ocasión en una de sus armas de cilindro, aunque sin duda bastante diferente a lo que entendemos por un revólver tradicional,
en el que un cambio  evolutivo hace que esta arma corta  se convierta en una carabina.
Como dato curioso decir que no fueron pocos los inconvenientes que se le planteron al tratar de introducir esta arma en el mercado español,dado que nuestra “ley de armas”,y me refiero a la española, prohibe las pistolas o revólveres que tengan acoplada una culata (y repito “que tengan” para evitar interpretaciones erróneas).La versión fabricada por Alfa-Proj era, en teoría, perfectamente vendible en nuestro mercado puesto que por sus dimensiones sólo se podía encuadrar entre las armas largas,las que tienen más de 30 cm de cañón ó 60 de longitud total.



Pero se dio la circunstancia de que debido al mecanismo de doble acción del revólver se le aplicó la cualidad de convertir al arma en “semiautomática” ¡¡ Pais !!,que diría Forjes.Debido a esta curiosa interpretación y teniendo en cuenta que su cilindro tenía capacidad para seis cartuchos,resulto que  entraba en conflicto con la admitida para los rifles, en los que se limita a cinco incluido el de la recámara y aquí hay seis recámaras, se pongan como se pongan.
En definitiva, que la fábrica checa modificó su mecanismo para que  funcionara sólo en simple acción,con lo que los revólveres-carabina pudieron por fin importarse a España,( pese a todo, el importador incluye una copia del escrito de autorización con cada ejemplar).
Se trata de  un revólver de concepción clásica, robusto y bien elaborado, en el que destaca el cañón de 12 pulgadas de longitud (que pasa a ser de 20 en las versiones para los calibres .22 LR y .22 WRM), en el que se ha situado un guardamanos que resulta cómodo de empuñar para favorecer la estabilidad y la puntería, y que puede desplazar su situación longitudinalmente al situar su tornillo de anclaje en cualquiera de los tres taladros practicados en el metal.
Por supuesto que el otro elemento a destacar es la generosa culata que otorga fundamentalmente en nuestro caso el cambio de categoría, y que se ancla en el arma desde una larga pletina de acero soldada a la zona inferior del armazón, integrando a su vez en su estructura la cacha izquierda. La modificación ofrece en cualquier caso un resultado más que aceptable en estética y notable en cuanto a ergonomía y manejabilidad. El revólver- carabina, se encara francamente bién, aunque por lógica el alza queda un tanto próxima al ojo del tirador y cada uno habrá de buscar su distancia óptima para apuntar en función de sus gustos o hasta de su capacidad visual.
Viene preparada de fábrica para poder  instalar un visor óptico, lo que puede hacerse sin ninguna dificultad tras retirar el alza completa y aprovechar su espacio para integrar una base de tipo Weaver sobre la que montarlo.
La terminación general del arma es del todo correcta y en su interior encontramos piezas robustas y mecanizadas en acero que aseguran un largo funcionamiento sin problemas.
Un detalle a tener en cuenta es el pequeño pistón con muelle que se encarga de situar la leva de arrastre del cilindro en su lugar y que habremos de retener con una aguja desde el minúsculo orificio previsto a tal fin en la tapa de los mecanismos, pues de no hacerlo así no podremos cerrarla adecuadamente.

 Revólver-carabina Alfa-proj calibre .22 LR / .22 WMR con cañón de 50,8 mm.

Por supuesto el mecanismo cuenta con un seguro que impide que el martillo alcance el percutor si el disparador no está completamente oprimido.
Es un arma sencilla y del todo fiable en su funcionamiento, con un disparador que apenas supera los 1.800 gr; muy segura y cómoda de manejar, atractiva incluso por su peculiaridad y que puede ser práctica para los cazadores a la hora de abatir piezas de mediano tamaño en zonas de espesura, al margen de atractiva para muchos aficionados cuando se trata de divertirse practicando sobre un blanco.

Características

• Origen: República Checa.
• Designación: Revólver-Carabina.
• Fabricante: Alfa-Proj (Brno).
• Calibre: .357 Mag/.38 Spl.
• Sistema: Revólver de simple acción.
• Capacidad de carga: 6 cartuchos.
• Longitud total: 734 mm.
• Longitud cañón: 30,6 cm (12”).
• Peso en vacío: 2,29 Kg.
• Miras: Alza ajustable y punto de mira en rampa.


Fuente:Revista Armas